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Hay espacios dentro del hogar que ceden su protagonismo a otras estancias sin que ello haya de suponer, necesariamente, una merma en su atractivo estético. La entrada y los pasillos son zonas de la casa que, lejos de resultar intrascendentes, pueden aportar valor estético al conjunto. Una cuidada iluminación, un accesorio coqueto, una pieza de mobiliario adaptado a las condiciones particulares de estas áreas del hogar… Cualquier de pequeño detalle puede contribuir a darle a estos espacios un aspecto, sencillamente, espectacular.
En este escenario, las paredes se convertirán en tus mejores aliadas y es que, con independencia de la superficie que ocupen la entrada y el pasillo, su decoración será la clave. Por eso en este artículo hemos preparado para ti una selección de 6 ideas geniales e inspiradoras. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!
¿Has oído hablar de los jardines verticales? Sin llegar a convertir las paredes del pasillo en muros verdes propiamente dichos, la incorporación de plantas y flores como parte de la decoración de sus paredes, dotará a este espacio de un encanto singular. Intercalar la presencia de macetas con un revestimiento de efecto en tres dimensiones, como el que ves en la imagen, así como con una cuidada iluminación y una selección cromática suave, le conferirá a tu pasillo un aspecto arrebatador.
De nuevo, la combinación de elementos hace las veces de receta del éxito para un diseño fascinante y atractivo. El área destinada a la entrada y el pasillo de esta vivienda aglutina, no solo una cuidada selección de muebles y accesorios sino, además, diferentes revestimientos para las paredes que confieren a ambos espacios un aspecto con mucha personalidad. Esa contraposición sirve además para dividir los ambientes, creando una atmósfera moderna muy elegante.
La elección del color blanco como tono principal de la decoración es perfecto para hacer que los espacios parezcan más grandes. Lejos de ofrecer un aspecto aséptico o aburrido, este diseño es un ejemplo contemporáneo lleno de atractivo. El peso del mismo recae, no sólo en esa maximización de la percepción espacial, sino en los accesorios elegidos. El cuadro que descansa sobre la pared de la entrada es ideal para sumar un punto focal que sirva de contrapunto a la pulcritud del color blanco.
Los espacios reducidos tienden a potenciar la creatividad de propietarios y decoradores que hacen del diseño de los interiores, una oportunidad única para dar con soluciones funcionales y altamente atractivas. En este caso, la pared de la entrada hace las veces de escenario para una atractiva biblioteca. Las estanterías cuentan con su propio sistema de iluminación, llamando la atención sobre un espacio que se convierte en una bienvenida triunfal para el visitante.
Las limitaciones espaciales son, con frecuencia, el principal hándicap que puede ofrecer la decoración de la entrada o el pasillo. No obstante, siempre y cuando la superficie lo permita, no hay por qué limitarse a un único detalle para dotar de atractivo estos espacios. Fíjate en esta composición. El diseño está lleno de detalles que van desde sofás, cómoda y accesorios a los diferentes revestimientos de las paredes sobre las que, además, se apoyan un espectacular espejo y una atractiva selección de cuadros a modo de galería. ¿Recargado? Nada de eso. Totalmente, armónico y sofisticado.
La última de nuestras ideas para las paredes de la entrada y el pasillo es todo lo contrario a lo que veíamos en el ejemplo anterior. En esta propuesta, la sencillez domina el diseño consiguiendo un efecto de lo más atractivo. Un sencillo estante de madera hace las veces de soporte a los cuadros que decoran la pared, un recurso artístico muy acertado para decorar este espacio sin tener que sacrificar parte de su superficie.
¿Te gustaría conocer más diseños inspiradores para la entrada y el pasillo? Descúbrelos en nuestro artículo: 22 ideas maravillosas para la entrada y el pasillo
