Aún nos quedan varios días para disfrutar este verano y qué mejor que hacerlo en un casa de campo, cómoda, amplia y con una gran pileta. Desde Brasil te mostramos este proyecto del despacho brasileño Mina Arquitetura & Construções que cumple con esas ideas.
Ubicada en un entorno de morros, en donde el color verde intenso de la vegetación es el gran protagonista, esta casa de campo tiene todo lo necesario para pasar las vacaciones o un fin de semana. De diseño tradicional, sencilla pero con algunos detalles, a continuación, descubrí esta casita que esconde algunas sorpresas.
Por fuera la casa tiene un diseño tradicional, con notas rústicas, que se acopla muy al paisaje. No busca sobresalir. Se adapta al entorno, con sencillez y estilo.
El techo a dos aguas, que cubre la casa, quizás es el elemento más llamativo de la estructura. Cubierto de tejas y con detalles en madera agrega un aire rural muy particular.
Y si hablamos de aire rural, es un hecho que en este proyecto lo natural se encuentra presente en todos lados. Esta pared cubierta con enredaderas es una muestra. Sin duda, una opción muy vistosa que embellece la estructura de la casa y la viste de naturaleza.
Otra forma de contacto con la naturaleza es esta galería semicubierta. Una gran opción que crea un espacio multiuso y de transacción entre el interior y exterior. Hacia el final de la galería, la vista remata con una fuente de agua; una de las sorpresitas de este proyecto.
La fuente de agua, a diferencia del resto de los elementos que forman parte de la vivienda, cuenta con un diseño moderno, casi minimalista. El espejo de agua se extiende a lo largo de la contrafachada y se conecta con el interior por medio de un pequeño puente de madera.
Desde esta zona de la casa la vista hacia los morros y al entorno es muy agradable. Pero no menos es la pileta de diseño irregular que le pone el broche de oro a este jardín.
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Por dentro el diseño es sencillo. Los espacios se visten con una paleta de colores cálida, obscura que transmita una sensación de bienestar. Tonos marrones son los favoritos para cubrir paredes y muebles.