En este libro de ideas vamos a hablar de un estilo de vivienda que los arquitectos colombianos, especialmente los que prefieren diseñar para regiones más agrestes dominan con maestría: las casas rústicas pequeñas.
Ahora, cuando decimos casas rústicas, no nos referimos a una decoración descuidada, que por el simple hecho de mostrar un poco menos de pulimento y más aspereza carezca de encanto. Por ejemplo, el uso inspirado de materiales de construcción locales, como piedra y madera de la región, que le darán a la casa rústica la facultad de poder formar parte del paisaje, al replicar alguno de los colores de la naturaleza en sus revestimientos. El respeto por el entorno es vital, ya que las viviendas rústicas buscan justamente no tener un efecto visual disruptivo en relación con su entorno. Otro aspecto importante en los recintos interiores es el mobiliario y la decoración que deben ser acordes a la fachada, esto significa muebles fuertes, tapizados en telas apropiadas y preferiblemente de fibras naturales. La decoración un poco artesanal y con elementos regionales le dará ese carácter especial. Eso sí, cuidado con los clichés, en los que es fácil caer cuando decoramos casas rústicas. Salir a comprar todos los textiles artesanales que encontremos el primer día, definitivamente no es la manera decorar una casa de este estilo, ya que esta estética lejos de fluir, parecerá artificial y forzada.
Acompáñennos a conocer algunas viviendas que les darán ganas de comprarse un terrenito en algún lugar recóndito de Colombia y contratar a un arquitecto que les construya su pequeña casa rústica.
Las casas de madera rústicas son las más representativas de este estilo ya que este material suele reflejar con mayor exactitud que ningún otro las cualidades de esta estética: cálida, acogedora y en ocasiones, un poco áspera.
Una opción para construir en tiempo récord y sin producir contaminación en el terreno es la de decantarnos por una pequeña casa rústica que sea prefabricada.
Uno de los elementos decorativos más importantes del estilo rústico es la integración con el entorno y el priorizar siempre las vistas.
Una opción para que la construcción sea más ecológica y el presupuesto baje significativamente es usar materiales reciclados, como pallets o madera de demolición.
Son el refugio ideal para disfrutar de un chocolate caliente, mientras afuera llueve o hace frío. Este estilo resulta en este caso especialmente acogedor.
En tierra caliente, se buscará darle a nuestra casa rústica algunos toques tropicales, que sin desvirtuar la esencia del estilo, le aporten mayor diversidad.
El diseño de la casa rústica, como cualquier otro, debe darle preponderancia a optimizar el espacio, generando lugar adicional de guardado y evitando que los interiores se sientan abarrotados o sofocantes.
Estamos acostumbrados a las casas rústicas con los típicos techos inclinados, a dos o cuatro aguas. Lo cierto es que nada impide que una casa rústica con techos planos sea tan linda y rústica como las otras.
Y aquí mostramos la contraparte, que es la típica casa rústica con techos a dos aguas, ideales para climas montañosos con precipitaciones muy frecuentes.
La casa que construyamos para disfrutarla los fines de semanas y en vacaciones, puede convertirse en una inversión si la alquilamos por temporadas cuando no la estamos usando.
La fusión entre rústico y moderno es una de las más exitosas que hay, ya que cada estilo tiene lo que al otro le falta y esta complementariedad nos da excelentes resultados.
El ladrillo y la piedra son dos materiales que, si bien no se utilizan tanto como la madera en la construcción de casas rústicas, aportan textura y color.
Esta joya es un diseño que se hizo imitando a un vagón de tranvía. El resultado no puede ser más encantador.
Si queremos tener una casa de estas características en la ciudad, podemos suavizar un poco las aristas más acusadas de este estilo, estucando las paredes en blanco o combinando los materiales más texturizados, con otros más pulidos.
La construcción de casas rústicas y pequeñas tiene como ventaja ser más expedita y fácil, por las características especiales de sus materiales, que no reciben tantos tratamientos y porque muchas veces son prefabricadas o se levantan con sistemas de construcción en seco.
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